
La industria alimentaria es un campo en evolución continua, y los adelantos en tecnología desempeñan un papel crucial en su progreso. A lo largo del tiempo y sobre todo en el último tiempo hemos podido observar cómo la tecnología ha transmutado la forma en que producimos y procesamos nuestros suministros, refiriéndose especialmente como por ejemplo lo que compete a los alimentos procesados, bebidas y líquidos, agroindustria, lácteos, entre otros.
Reconociendo y valorando que la Industria de alimentos, siempre se ha caracterizado por constantes cambios, tanto en el uso de tecnologías de vanguardia, como en el desarrollo de nuevos productos y servicios es que quisimos indagar sobre las nuevos avances y tendencias en estas materias, a sabiendas que son de vital importancia para el desarrollo económico de nuestro país. Al conversar con distintas personalidades del área educacional e industrial, quienes se cuestionaron estas interrogantes, pudimos constatar que no es un tema menor actualizar a la comunidad tecnológica, pero desde distintas perspectivas de pensamiento.
Elier Ruiz, Jefe Especialidad Electrónica, Liceo Industrial de Santiago, señala: “Chile es conocido por su variada producción agrícola y pesquera, que incluye frutas, verduras, vinos, mariscos y otros alimentos. El avance tecnológico puede ayudar a mejorar la calidad y la eficiencia de la producción, lo que es esencial para mantener y aumentar la competitividad en los mercados nacionales e internacionales. La industria de alimentos en Chile puede beneficiarse de la tecnología para desarrollar productos innovadores y de mayor valor agregado. Esto incluye la creación de alimentos funcionales, alimentos gourmet y productos que se adapten a las tendencias alimentarias globales, como alimentos orgánicos y naturales. La tecnología facilita la investigación y el desarrollo de nuevos productos alimenticios. Esto incluye la creación de alimentos más saludables, la mejora de los procesos de conservación y la introducción de alimentos funcionales y personalizados para satisfacer las necesidades de los consumidores.
La adopción de tecnologías como sensores remotos, drones y sistemas de información geográfica (SIG) permite a los agricultores chilenos optimizar la gestión de sus cultivos. Esto incluye la aplicación precisa de fertilizantes y pesticidas, así como la monitorización de las condiciones del suelo y el clima para maximizar la producción y reducir los impactos ambientales. La automatización y la robótica se utilizan cada vez más en la producción de alimentos para aumentar la eficiencia y la consistencia en la fabricación de productos alimenticios. Esto es relevante tanto para las grandes empresas de alimentos como para las pequeñas y medianas empresas en Chile”.
Por su parte, Roberto Arancibia, Investigador del área de Manufactura Aditiva de Leitat Chile, comenta: “La innovación y el progreso tecnológico conllevan ventajas innegables para las industrias que implementan diversas tecnologías de vanguardia. Estas ventajas se reflejan en áreas cruciales como la producción, la distribución y la experiencia del usuario. Por tanto, es esencial reconocer el valor e incursionar en la adopción de tecnologías que contribuyan al desarrollo de la industria de los alimentos.
La fabricación aditiva ha emergido como una tecnología disruptiva que ha ganado gran impulso en su adopción en los últimos años. Esto se debe a una serie de beneficios notables, como la capacidad de crear herramientas y piezas personalizadas para maquinarias, reduciendo los tiempos de entrega, la producción de series cortas utilizando moldes con formas complejas, así como la creación de envases, las capacidades en Chile están instaladas, solo se debe confiar en su implementación y sus beneficios.”
Asimismo, Francisco Salas, Director nacional de carreras IPChile,
acerca de la importancia del avance tecnológico en la Industria de Alimentos asevera:
“En la actualidad el aumento de la población y la densidad de esta, han llevado a la industria
alimentaria a tener grandes desafíos para poder proveer la cantidad de alimentos necesaria
para la población y con la calidad necesaria, por otro lado, cada vez hay menos zonas
agrícolas para el cultivo, por lo cual los alimentos procesados son la solución para poder
cubrir la demanda en cantidad y calidad de alimentos que se requieren.
Desde la mirada de lo practico los alimentos procesados son rápidos y fáciles de cocinar y a
su vez los avances tecnológicos permiten que este tipo de alimentos sean lo más parecidos
a un producto casero para lo cual necesitan tecnologías de punta para conseguir esto.
En resumen, podríamos decir que los avances tecnológicos en la industria alimentaria son
totalmente necesarios para poder cubrir la alta demanda que requiere la población actual, y
todo esto es sin considerar aun los efectos que está generando en los cultivos el cambio
climático, para lo cual toda la tecnología dispuesta para procesar o elaborar alimentos es
necesaria para que tengamos tomates en invierno (los cuales no son de dicha temporada)
con el plus de que se pueden conservar y preservar de mejor forma”.
Sobre las tendencias tecnológicas visualizadas observa: “Hoy en día las tendencias tecnológicas buscan poder desarrollar o procesar alimentos que
aporten a los organismos (desde nutrientes, proteínas, carbohidratos, vitaminas,
minerales, etc.) y a su vez que no generen trastornos o problemas en cierta parte de la
población (por ejemplo, libres de azúcar, gluten, sodio, bajos en calorías, etc.) para que
sean lo más sanos posibles, de esa forma se puede tener una dieta equilibrada.
Por otro lado, en el área de lácteos hay un gran avance tecnológico con productos que
tienen que tener una vida útil más larga y que no pierdan su calidad nutritiva y
organoeléctrica (capacidad sensorial). Es así como también hay avances en la industria del
secado como el café y especies en donde se aplican tecnologías como la liofilización
(método de secado a bajas temperaturas) para mantener las propiedades de los productos
separándolas del agua y así lograr que estos alimentos no pierdan sus propiedades y
características (como olor, color, sabor, etc.).
Mientras que por otro lado la biotecnología trabaja en el desarrollo de encimas y
fermentos para lograr desarrollar productos más sanos con tecnología natural como
hongos y bacterias y que a su vez actúan sobre la fermentación en la preparación de
algunos alimentos (la obtención de productos prebióticos y probióticos). Todo esto para
obtener alimentos más sanos y naturales para el consumo de la población”.
Desde la Universidad de Talca, el académico Fernando Fuentes explica: “En el contexto chileno, el avance tecnológico en la Industria de Alimentos es crucial para mantener y potenciar su posición como uno de los principales exportadores agrícolas del mundo. La agroindustria nacional, reconocida por su diversidad y calidad, se beneficia enormemente de las innovaciones que permiten maximizar la productividad en distintas zonas climáticas y geográficas. Las tendencias tecnológicas que se visualizan en Chile incluyen la Agricultura de Precisión, que aprovecha sensores y drones para monitorear y optimizar cultivos en vastas extensiones de terreno, y la aplicación de Inteligencia Artificial en la predicción de patrones climáticos y gestión de recursos hídricos. Estas tecnologías no solo impulsan la eficiencia, sino que también fortalecen la sostenibilidad y resiliencia de la agroindustria chilena ante desafíos globales”.
Y finalmente, Gonzalo Flores, Ingeniero de ventas y servicios, Katze Ergonomía y Tecnología Industrial, señala: “El uso de la tecnología permite a las empresas adoptar soluciones inteligentes que ayudan a mejorar los controles de sus procesos productivos lo que se traduce en una producción segura, eficiente y sostenible.
Esto se logra por medio de la precisión en los tiempos de respuesta, así como también en la confiabilidad de los datos que se obtienen a través de la inteligencia de los distintos sensores y soluciones que como resultado determinan procesos óptimos y por tanto importantes ahorros en términos de energía, tiempo y recursos.
Las soluciones de sensores inteligentes reducen la complejidad y logran que las instalaciones sean más flexibles y rápidas, maximicen la productividad y reduzcan el desperdicio de materias primas y energía”.
En virtud de las tendencias comenta: “La inteligencia artificial está llevando a la industria a nuevos estándares lo que aumenta el nivel de exigencia en la calidad de los productos y en particular al control de calidad basado en imágenes. Recientemente Baumer ha puesto en el mercado su solución VeriSens que son sistemas de procesamiento de imágenes completos en forma de sensor. Su funcionamiento es muy eficaz en aplicaciones que requieren que se comprueben varias características simultáneamente o cuando el objeto de la comprobación cambia constantemente de posición. Los sensores de visión VeriSens son también un componente ideal para inspeccionar diferentes lotes en una línea de producción y transmitir los datos recopilados para su evaluación”.
Al concluir se deduce que la tecnología permitirá siempre optimizar la producción, el transporte, el almacenamiento y el consumo de alimentos, más al utilizar hoy en día los beneficios u bondades que brindan el Internet de las Cosas, Inteligencia Artificial y Big Data que mejoran la eficiencia y flexibilidad en la fabricación de los alimentos todo lo relativo a la cadena de valor, seguridad y control de la calidad.
Artículo extraído del Especial AIE denominado: Edición Alimentos AIE 2024